TEXTO INSTRUCTIVO

CÓMO FREIR UN HUEVO

Debe disponer de los siguientes elementos: un huevo, una sartén, aceite, sal, una espumadera y un plato.

Primer paso: Poner aceite suficiente en la sartén. Es fundamental poner la sartén con la abertura hacia arriba. De lo contrario, el aceite se verterá.

Si pone poco aceite, el huevo no se freirá y podría quedarle tal que así:

Segundo paso: Poner la sartén en la cocina a fuego medio para calentar el aceite. Si el aceite está frío, el huevo no se freirá. Debe poner la sartén encima del fuego si quiere que el aceite se caliente.

Tercer paso: Cascar el huevo en un plato o tazón pequeño o directamente en la sartén con cuidado de no romper la yema. A continuación, verter el contenido del huevo (yema y clara) dentro de la sartén. No echar en la sartén el cascarón, ya que no es comestible.

Cuarto paso: Cocinar el huevo, sin tocarlo, hasta que el borde claro se vuelva blanco. Cuando los bordes se hayan blanqueado, bajar el fuego. No mover el huevo en este paso, porque todavía estará gelatinoso y se podría romper. Este paso suele durar entre 2 y 3 minutos.

Quinto paso: Comprobar la dureza de la yema tocándola suavemente con la espumadera. Cuando ya no haya partes claras ni gelatinosas en la clara, el huevo estará listo.

 

Sexto paso: Con ayuda de la espumadera, levantar el huevo de la sartén con un movimiento rápido y firme para no romperlo.

Séptimo y último paso: Colocar el huevo en un plato cuyo diámetro sea mayor que el del huevo. En caso contrario, el huevo se verterá. Poner sal al gusto por encima del huevo y comer una vez baje la temperatura para evitar quemarse la lengua.